La ermita de la Virgen del Puerto, a unos dos kilómetros de Salmerón, es la única que queda en pie de las más de diez que llegó a tener el pueblo. Esta pequeña edificación estaba próxima al convento de frailes agustinos que se encontraba al otro lado de llamado “arroyo los Santos”. Dicho convento funcionó entre 1337 y 1836. Lo fundó Gil Martínez, Despensero Mayor del Infante don Juan Manuel, aunque parece que la ermita pudo ser anterior. Pese a la leyenda de que la Virgen le libró de una serpiente y en agradecimiento fundó la casa agustina (decían los abuelos que el caballero dijo: «Virgen del Puerto, si me sacas de este apuro, te hago un convento, con un san Agustín dentro»), lo cierto es que Gil Martínez fue un personaje histórico, incluso albacea testamentario del Infante, y fue enterrado en la iglesia gótica del lugar por él fundado.
Los nacidos en los 60 somos los últimos que hemos podido ver las ruinas ojivales de templo y monasterio, de cuyas paredes aún quedan testimonios gráficos. No sabemos qué aspecto la talla primitiva de la Virgen, que tuvo que ser anterior al siglo XIV, momento de la fundación de esta comunidad agustina. Tal vez fuera una imagen gótica y se perdiera, como otras reliquias, en una de las muchas guerras que sufrió el convento. Afortunadamente, tenemos una foto de la Virgen que veneró la generación de mis abuelos: se trata de una imagen de vestir, del siglo XIX, que era muy del gusto del pueblo. La fotografía está hecha en la puerta de la ermita en 1915. Sobre el dintel se puede ver un azulejo en el que pone “Ermita de la Virgen del Puerto” y un ventano por el que se veía la luz que iluminaba perpetuamente a la imagen.La ermita quedó destruida en la Guerra Civil, así como la talla de la Virgen y en la primera mitad de los 60 el sacerdote del pueblo puso otra imagen y se procedió a arreglar la ermita, cuyas obras se terminaron en 1967. En octubre de ese año se trasladó, en una procesión iluminada con velas, la imagen desde la iglesia del pueblo hasta la ermita, al caer la tarde.La costumbre de la romería a la Virgen del Puerto podemos suponer que se iniciara, asimismo, en los 60, por iniciativa del sacerdote don Pablo Julián, que estuvo en Salmerón bastantes años. Antes de eso, parece que en el mes de mayo bajaban las niñas de la escuela con la maestra a merendar en este lugar. La primera crónica de una “peregrinación” a la ermita en la prensa es de septiembre de 1966, pues la fiesta de la Virgen, como tantas otras, se celebraba el 8 de dicho mes, día de la Natividad de María.Crónicas concretas de la romería aparecen en la prensa en septiembre de 1969 y mayo de 1970, año en que se trasladó la fiesta a la primavera y que incluso allí mismo se cantaron los “Mayos” a la Virgen. Todas están firmadas por Valentín Fernández Cuevas, periodista natural de Auñón, pero que tuvo casa y residió en nuestro pueblo por aquellos años.La ermita, tras la reconstrucción terminada en el 67, presentaba un recinto cerrado, de planta cuadrangular, enfoscado de cemento y con una puerta de zinc por cuyo ventano se podía ver la imagen. Sobre el dintel, un letrero, esta vez de madera, anunciaba la titularidad del mínimo santuario. Fuera de él había poyos para el asiento del visitante y enfrente, una mesa de piedra hecha con una rueda de molino y rodeada de bancos de piedra.A principios de los 90 se procedió a una nueva intervención en la ermita y se descubrió la piedra de sus cuatro muros, en cada uno de los cuales había un vano con arco. Se decidió, no sé si con acierto, dejar el edificio abierto, sólo protegido con rejas. A la vez, con el fin de evitar saqueos y deterioros se compró una Virgen de piedra, un busto de líneas renacentistas, poco adecuado a la piedad popular. ´Poco después se retomó la costumbre de celebrar una romería, pero ya trasladada al último fin de semana de mayo. De entonces data la costumbre de acompañar a la Virgen desde el pueblo a la ermita con el traje típico alcarreño. Hace ya algo más de diez años el pueblo compró una hermosa talla de la Virgen del Puerto, inspirada en la de la misma advocación de Plasencia. Esta se venera todo el año en la iglesia parroquial de Salmerón y sólo baja a la ermita el día de su fiesta.Os dejo imágenes de las distintas épocas de la ermita y de la romería, así como las noticias de prensa que hacen referencia a ella.
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