El nombre de Salmerón

El nombre de Salmerón

Pese a lo común del nombre de Salmerón como apellido, son diversas las teorías sobre el origen de su etimología.

En este artículo revisamos desde las ingenuas explicaciones populares trasmitidas de padres a hijos por los salmeronenses, pasando por las primeras explicaciones pseudocientíficas del siglo XIX, hasta las últimas aproximaciones lingüísticas al origen del topónimo.

Antiguo letrero de entrada al pueblo de Salmerón, 1968

Pese a lo popular que pueda ser el nombre de Salmerón como apellido español, lo cierto es que el significado del topónimo no resulta evidente. Las primeras citas que de él encontramos remontan a época medieval.

Según algunos investigadores el más antiguo testimonio aparecería en el siglo XII, en el llamado Cronicón de Sampiro, que nos cuanta cómo Ordoño II «Devastó las tierras de Cendejas (Sintilia) que despobló, tomó los castillos de Sarmalón y Eliph, y depredó Palmaces, Castejón y Magnancia.«, siempre que se identifique la forma Sarmalon, con la actual Salmerón, hecho que ofrece bastantes dudas.

Cronicón de Sampiro

El nombre de nuestro pueblo se documenta en algunos documentos medievales posteriores bajo la denominación de “Salmerón de Suso”. Así, por ejemplo en el documento de donación que hace Alfonso VIII al monasterio de Óvila de unas viñas y unas heredades en Salmerón en 20 de diciembre de 1208 o en la confirmación del privilegio concedido por Alfonso XI al convento de la Virgen del Puerto en 1381:

«Por bien de facer merced y limosna al Prior y al convento del monasterio de Santa María del Puerto de la Orden de San Agustín que es cerca de Salmerón de Suso…«

Este término “Suso” es la forma que en castellano de la Edad Media adopta el adverbio latino sursum “arriba”. Tendríamos entonces que el pueblo se denominaba Salmerón “de arriba”, haciendo referencia a su situación elevada sobre un cerro.

Simplemente como Salmerón se documenta en el texto latino del Cronicón de Don Juan Manuel: «1310.- Eadem Era recuperavit Dominus Joanes a Salmeron, in Augusta«, lo que traducido vendría a ser «1310.- En este año recuperó Don Juan (Manuel) a Salmerón, en el mes de Agosto».

Posteriormente aparece denominado como “Salmerón el Grande”, seguramente por oposición a los núcleos de población mucho más pequeños que se conocen como los Salmeroncillos, Salmeroncillo de Arriba y Salmeroncillo de Abajo, que con toda probabilidad fueron fundados por habitantes de Salmerón en fecha remota.

El significado del término Salmerón no se ha aclarado de manera definitiva. Tenemos, por una parte, las explicaciones populares, inaceptables desde el punto de vista científico, pero que resultan curiosas y dan cuenta de la manera que tenían nuestros antepasados de entender el origen de su lugar natal. En este sentido es interesante y graciosa la explicación que vincula el nombre de la localidad con la dominación musulmana. La historia es la siguiente: cuando los cristianos conquistaron la localidad, un moro habría quedado escondido en el término. Los cristianos, libres ya del poder musulmán, le habrían conminado a salir de su escondite al grito de “Sal, morón, sal, morón” y de ahí habría quedado Salmerón como nombre del pueblo. Aparte de lo ingenuo e inverosímil de la explicación, se nos muestra cómo en el imaginario colectivo no hay duda de que el origen del pueblo está ligado a la Reconquista, como es el caso de otras localidades de la comarca y de la provincia de Guadalajara en general. A una versión de esta leyenda se refería Don Carlos Moreno Colmenar, párroco del pueblo en 1787, en su respuesta a la Relación de Tomás López: «El nombre antiguo de Salmerón es tradición haver sido Sal Morón, tomado de un Moro fuerte y rico que lo poseía».

Durante el siglo XIX surgen explicaciones pseudocientíficas, como la del obispo Muñoz Soliva, quien, convecido de que Salmerón es una ciudad celtíbera fundada por los Thobelios, propone una etimología basada sobre sal o sala-, que significaría «peña» y merome, con un significado que sería «sobre las alturas del campo». Reproducimos, como exponente del modo de explicar la toponimia en el siglo XIX, las palabras del obispo conquense:

«Salmerón se compone de las palabras sal- o sala PEÑA, y merome, que, según Menochio y Nobilio, significaría SOBRE LAS ALTURAS DEL CAMPO. Cambiada la m en n y suprimida la última e del merome, se quedó en Salmerón, la misma raíz que vemos en Salmeroncillos».

Las explicaciones científicas, ya del siglo XX, son variadas, sin que haya una solución definitiva para la etimología del nombre se Salmerón. Destacamos algunas de ellas y aportamos la bibliografía a la que el lector puede acudir para ampliar detalles:

Ranz Yubero, basándose en Manuel García Blanco, lo relaciona con la forma Salmoral, como derivado de sale muria «salmuera», para designar a los trozos de terreno salobre que abundan en el término(1).

Grace de Jesús Álvarez afirma que Salmerón alude a «una variación de trigo fanfarrón(2), de aristas negras». Efectivamente, según el Espasa, este es el nombre que recibe en algunas zonas de Andalucía una variedad de trigo sarraceno. Corominas alude al paralelo de otras variedades de trigo fanfarrón que también toman su denominación de nombres de pueblos, como fiñana (de Fiñana, Almería) o jijona (de Jijona, Alicante). En cualquier caso, esto lleva a pensar que es el pueblo el que da nombre al cereal, y no al contrario. Con lo que, por este camino, tampoco se llega a conocer el significado del término Salmerón. Sin embargo, no hay constancia de que en nuestro pueblo se denominara así a esa variedad del cereal, aunque parece que sí se cultivó el llamado «trigo negrillo», que correspondería a la descripción física del trigo fanfarrón mencionado.

-Para Julio González el nombre de Salmerón es una forma con sufijo –on de diminutivo. Este valor para el sufijo –on era muy frecuente en la baja latinidad y perduró en Castilla por lo menos hasta es siglo XII. González no dice cuál sería la forma previa sobre la que se crea el diminutivo, ni su significado.

Monge Molinero defiende un origen sagma, en latín «albarda», para el nombre del pueblo, motivado bien por la forma del cerro donde se asienta la población, que recordaría este arreo de los jumentos, bien porque estos animales «fueran la causa de la labrantía de los campos».

-La más reciente explicación del nombre de Salmerón se debe Emilio Nieto Ballester, quien ofrece dos posibilidades para la interpretación del término: La primera partiría de una forma so-lomerón , con la preposición so «bajo», y un derivado en –ero, a partir de loma, con la siguiente evolución fonética, *solomerón, con disimilación de /o/ en /a/ y síncopa de la /o/: *solomerón > *salomerón > *salmerón. Significaría «bajo la loma». Dice Nieto Ballester: «El examen del lugar concreto que nos ocupa, Salmerón, no esta en contradicción con esta hipótesis, pues efectivamente la villa se asienta a los pies de lomas o colinas claramente visibles». La segunda posibilidad ofrecida parte del latín sagma «albarda», préstamo del griego, que ha pasado a todas las lenguas romances y, concretamente, al castellano bajo la forma salma «silla de montar, albarda». En otros muchos lugares aparece la forma albarda en la toponimia para designar la figura ondulada y suave de uno o varios cerros, así La Albardilla en Bustarviejo (Madrid) o La Albarda en Calasparra y en Lorca (Murcia), entre otros. En paralelo, la forma Salmerón sería un derivado en -ero a partir de salma, con el sufijo –on de dimitutivo: Salm-ero-on > Salmerón, con el significado de «la albardilla», haciendo referencia a la forma de su orografía.

El mismo nombre de Salmerón llevan al menos otras dos localidades en España: un cortijo en Almería y un caserío en Murcia.

En la toponimia menor hay distintos paralelos dentro y fuera de Guadalajara: Camino del Salmerón en Escamilla, Villaescusa y Valhermoso (Guadalajara), Tejadillo Salmerón en Peralveche (Guadalajara) y Vado del Salmerón en Zahorejas (Guadalajara); Barranco Salmerón, en Cabra de Santo Cristo (Jaén), Fuente de Salmerón en Bujalance (Córdoba), entre otros.

Como en otros muchos casos, el topónimo Salmerón dio lugar a un apellido. Personajes ilustres que lo ha llevado son: Alfonso Salmerón, teólogo jesuita nacido en Toledo que vivió entre 1515 y 1581; Francisco de Salmerón, religioso nacido en Fuentelaencina en 1609 y muerto en 1694; Melchor Salmerón, escultor de la primera mitad del siglo XVI, que hizo los adornos de la Capilla de los Reyes Nuevos en la Catedral de Toledo; los hermanos Francisco y Nicolás Salmerón, políticos españoles del siglo XIX y Exoristo Salmerón, pintor y dibujante español, nacido en 1877 y muerto en 1925. Actualmente este apellido es popular por el actor español Gustavo Salmerón.

NOTAS AL TEXTO DE EL NOMBRE DE SALMERÓN

(1) Aunque en el término no hay salinas, sí es cierto que la Dehesa que durante años fue de explotación comunal aparece denominada en los documentos del siglo XVIII como Dehesa Balsalobre (o Vallisalobre) del Buey Alaja. El topónimo, sin duda, hacía referencia al carácter salobre de la tierra.

(2) Como fanfarrón o sarraceno se entiende un trigo muy barbado, propio de climas cálidos.

BIBLIOGRAFÍA

Álvarez, Grace de Jesús, Topónimos en apellidos hispanos, Madrid, 1968.

Corominas, Joan, Diccionario Crítico Etimológico Castellano e Hispánico, Madrid, 1980. -García Blanco, Manuel, «San Morales y la flecha. Contribución a la toponimia salmantina», Homenaje a Fritz Krüger, Mendoza (Argentina), 1963.

González, Julio, Repoblación de Castilla la Nueva, Madrid, 1975-1976. -Muñoz Soliva, T.,Historia de la muy N. L. É I. ciudad de Cuenca, y del territorio de su provincia y obispado, desde los tiempos primitivos hasta la edad presente, Cuenca, 1866-67.

Monge Molinero, Eusebio, Topónimos de la Provincia de Guadalajara, Guadalajara, 1993.

Nieto Ballester, Emilio, «Maroto, Manotera, Salmerón: Aportaciones de toponimia española a propósito de la expresión de loma», Revista de Filología Española, Tomo LXXXII, 2002, 295-317.

Ranz Yubero, José Antonio, Toponimia Mayor de Guadalajara, Guadalajara, 1996.

Yago Andrés, Mª del Carmen, Repertorio de nombres geográficos. Guadalajara, Valencia, 1974.

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